Hospital Quirón.
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Son diferentes los factores que pueden llevarnos a tener envejecimiento facial pero el más evidente es el paso del tiempo, con él llega a nuestro rostro una serie de signos que nos indican que estamos ante un claro envejecimiento.
· Arrugas de expresión:
Son las que mejor se reconocen y se sitúan entre las cejas, la frente y las famosas patas de gallo en los ojos.
· Ojeras y bolsas:
Conocidas por todo el mundo pero que con el paso del tiempo se acentúan, y en algunos casos crean bolsas debido a la pérdida de tono muscular y/o por retención de líquidos.
· Poros más visibles:
Los poros se abren y se convierten en molestos “agujeros” que crean un impacto visual negativo e incluso de poca higiene facial, aunque no sea así.
· Manchas:
Aparecen manchas en la piel del rostro debido a lo que conocemos como fotoenvejecimiento, que se genera por la exposición solar a lo largo de los años. Si son producidas por el abuso de sol sin protección le llamamos queratosis.
· Descolgamiento del cuello:
Se genera flacidez debido a un exceso de grasa, lo que hace que haya una caída de la piel y esta se arrugue.
· Dilatación de los capilares:
Aparecen en nuestra piel pequeñas venas conocidas en medicina como telangiectasias, de color rojo o violáceo, que son de carácter superficial.
· Luminosidad:
Perdemos luz en nuestro rostro, y simplemente sucede por los años que hemos pasado con él expuesto a todo tipo de fenómenos como frío, calor, aire, sol, humedad, …
· Piel no uniforme:
Empezamos a notar que nuestra piel es más fina y por tanto más frágil. Poco a poco se ha ido perdiendo su elasticidad y ahora nos da la sensación de que hay zonas más tersas que otras.
Y tú, ¿has notado alguno de estos síntomas en tu piel? ¡Tenemos la solución! Pide cita sin compromiso y te ayudamos a recuperar tu piel.
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